El pasado jueves 23 de mayo Cami se presentó en el Teatro Municipal de Viña del Mar como parte de su gira «Anna esta alucinada», un show que me generaba varias incógnitas tomando en cuenta el formato de éste en el cual se concentraba en su EP «ANNA vol1. LOS AMANTES» y en reversiones de su catálogo en formato electropop siendo ella la única persona sobre el escenario.
Luego de un pequeño retraso a eso de las 21:00 horas una voz en off daba la bienvenida a público asistente (a grandes rasgos, entre un 75 a 80 porciento de la capacidad del recinto) y daba pie para una introducción full electrónica y cerca de los dos minutos aparecía en el escenario la figura de Cami para comenzar su espectáculo con «Nacimiento», primer track de su último EP y con el cual rápidamente nos mete dentro del mundo de Anna, uno tan calculado como expresivo.
De ahí en más el show avanzó de forma vertiginosa al que también daba tiempo para instancias más introspectivas pero de golpe sufrió un parate, tiempo en el cual la artista subió hasta uno de los palcos más altos del teatro para interpretar a capella el clásico de Violeta Parra «Gracias a la vida». Un momento lleno de solemnidad en el cual ella hizo gala de su potente registro no dejando y que sirvió como una pausa necesaria para un espectáculo lleno de energía.
La presentación continuó a ritmo galopante e incorporando clásicos de su discografía como «Querida Rosa» o su colaboración con Bronko Yotte “Qué Bueno Que Llegaste” para cerrar con «Ganadora» una jornada medida en cada paso por todo lo alto agradeciendo a los asistentes.
El paso de Cami por Viña del Mar sin duda dejó huella pero siento que el retraso con el que partió terminó jugando en contra ya que mucha gente en la parte baja (sobretodo las que iban con niños más pequeños) pasado la mitad de la presentación comenzaron a retirarse asumo por la locomoción (en la quinta región luego de una cierta hora si no tienes alguna aplicación quedas tirado) pero para los que nos quedamos hasta el final fuimos testigos de un show que si bien esta calculado no se siente frío y donde la artista apuesta fuerte por esta nueva propuesta en la cual no tiene miedo a dejar de lado canciones como «Abrázame» entre otras.
Si tuviera que agregar algo, hubo un par de canciones en las cuales la base electrónica a nivel volumen, y perdonen mi francés, se les va al carajo haciendo que ella deba casi gritar, pero en general es un espectáculo recomendable que si bien los fans van a disfrutar para los que no somos tan cercanos termina siendo una experiencia más que interesante.